25 de octubre de 2017

El fiel Escudero Jack

 


Entre los recuerdos de mi alma fiel,

Aparece un amigo tan leal,

Un compañero que era mi piel,

Caminando a mi lado, sin igual.

 

Jack, mi perro, de orejas al viento,

Inspiraba ternura y alegría,

Con su mirada, un dulce aliento,

En cada aventura, mi guía.

 

Juguetón como brisa en la pradera,

Acariciaba el alma con su presencia,

Con ladridos de amor, sincera,

Inundaba mi vida de esencia.

 

Otro día nace en la memoria,

Recordando tu noble corazón,

Entre risas y alguna victoria,

Juntos, enfrentando cada estación.

 

Amigo eterno, mi fiel escudero,

Contigo el tiempo era un regalo,

Recuerdos de afecto, sin embargo,

En mi alma, tu esencia no se ha apagado.

 

Juntos compartimos la travesía,

Orgullosos, desafiando la vida,

Riendo, llorando, día a día,

Eras más que un perro, mi guarida.

 

Aunque hoy tu ausencia duela tanto,

Recuerdo con gratitud cada instante,

Serás siempre mi eterno encanto,

En el cielo canino, radiante.

 

Ahora, en la noche, bajo la luna,

Cierro los ojos y te veo corretear,

En cada estrella, tu alma cuna,

Mi perro Jack, por siempre en mi andar.


JPabloc

30 de septiembre de 2017

La Magda vive en Narnia



Esta emparejada con un Gato
otro Gato es el dueño de la casa.
Su casa no sale ni en el mapa ni en el GPS.
Hay perejiles y cilantros raros.
Tiene ollas que emiten ruidos hipnóticos
con un cucharon de cocina blanco.
Vive en su living un baúl, que ha viajado
desde mi niñez hasta mi adultez,
atesorando el tiempo.
Y el vino, el vino no se acaba nunca
por que el Gato  solo con mirar la cava
lo multiplica.
Es Narnia!!!!


JPABLOC

13 de junio de 2017

Tiempos Aquellos

 

 


En mi tiempo, donde los sueños se desdibujan,

habitan recuerdos de lo que fue y nunca más será.

Un tiempo en que las calles susurraban secretos,

y estrellas se reflejaban en charcos de la ciudad.

 

Un hombre caminaba con soles en sus ojos,

perseguía amores que se esconden detrás de los huertos,

amores como pájaros, que al intentar tocarlos, desaparecen.

Ella, con sus cabellos de fuego y sonrisa de alquimia,

se fue diluyendo entre los días, como tinta en agua.

 

Los amigos, esos fantasmas que alguna vez rieron,

compartieron vino, carnes y tardes de lluvia,

se convirtieron en sombras que el viento arrastra.

En un rincón de un lugar donde solían encontrarse,

aún resuenan sus voces, ecos de un tiempo que huye.

 

La vida misma, ese río incesante,

se lleva consigo risas y llantos,

dejando apenas un rastro de lo que fuimos.

Cada paso dado, un escrito en arena,

borrado por las luces inclementes del tiempo.

 

Pasiones, como fuegos fatuos en oscuridad,

ardieron brevemente, consumiendo la noche.

En sus cenizas, queda el perfume del pecado,

un susurro de lo que pudo y no fue.

 

Y en el crepúsculo de la memoria,

se alza un mundo tejido de sueños perdidos,

de amores que se disolvieron como sal con en el viento,

de amistades que se desvanecieron en la bruma,

de una vida que se dispersa en el olvido,

y de pasiones que arden en el corazón del infinito.

 

Allí, en el rincón más escondido del alma,

las parábolas se entrelazan como raíces,

creciendo hacia el cielo de lo inalcanzable,

donde los sueños se encuentran y se pierden,

y donde, quizás, en el silencio del amanecer,

renace la esperanza de lo imposible.

                                                      JPabloc

7 de abril de 2017

El Canto de un grillo

No existe belleza más pura, triste y negra que escuchar un grillo, a media noche, con su canto clamando encontrar su pareja antes del alba y antes que la misma vida se le esfume.

JPABLOC